A continuación, es Juana Ponce de León, mujer de Juan Lorenzo, vecina de Cuenca, la que declara lo siguiente: Dijo que conoce a Jerónimo de Liébana, el cual anda con media sotanilla y ferreruelo de jerguilla acanelada, y con cuello de clérigo. Y asimismo esta testigo le ha oído a Liébana jurar por la fe de sacerdote, poniendo la mano en el pecho. Y que estando la testigo en su casa el día de San Antonio de Padua que pasó de este presente año, llegó Jerónimo de Liébana a cosa de las ocho de la noche y llamó a la puerta. La testigo le dijo qué quería y le respondió que quería hablar a su marido. Esta testigo le dijo que no estaba en casa y no sabía cuándo vendría...
domingo 19 marzo | Manuel Amores