Las obras de mejora de la carretera CM-3009, en el tramo de Villaescusa de Haro a La Alberca de Záncara, están cada vez más cerca y eso significa que los vecinos de estas localidades, junto con los de Rada de Haro, respiren con tranquilidad después de numerosas reivindicaciones a lo largo de los últimos años. Aumentará la seguridad de los vehículos que circulan por la vía y también supondrá una puerta de entrada del turismo para conocer mucho mejor la oferta monumental de toda esa zona de la provincia de Cuenca.
El alcalde de Villaescusa de Haro, Cayetano J. Solana, muestra su satisfacción de que el Gobierno regional haya atendido “por fin, nuestra petición de que arreglasen esta vía que es una de las que peor estado presenta de Castilla-La Mancha”. La inversión prevista en un primer momento es de 2,6 millones de euros y el plazo de ejecución de la obra será de alrededor de 10 meses. El proceso de licitación continúa abierto ya que hace unos días tuvo lugar la apertura de las ofertas económicas presentadas para llevar a cabo unas obras que, si todo marcha según lo previsto, comenzarían este verano.
Un total de 45 empresas han pujado por acometer los trabajos en este tramo de 21 kilómetros entre Villaescusa de Haro y La Alberca de Záncara, pero “estamos preocupados porque las ofertas son muy inferiores al presupuesto base de licitación”. Considera que “posiblemente haya bajas temerarias puesto que algunas rondan el 35% del precio base” y eso supone un arma de doble filo porque, si bien es verdad que hay interés por acometer esa obra, también podría darse el caso que se complicase el proceso de adjudicación.
Solana señala que el proyecto de rehabilitación que se ejecutará no solventará todos los problemas que hay en este tramo de la CM-3009 “ya que no se modifica nada del trazado original de la carretera: seguirá teniendo curvas peligrosas y cambios de rasante comprometidos”. Hubo proyectos para la mejora de este tramo que eran “mucho más ambiciosos porque contemplaban mayores modificaciones”. Incide en que lo ideal hubiese sido “por seguridad vial, no sólo asfaltar la carretera, sino también atenuar los cambios de rasante y suavizar las curvas peligrosas junto al río Záncara”.
Seguridad vial y justicia social
Tanto para los alcaldes como para sus vecinos es importante que arreglen este tramo de carretera que “está en tan mal estado que apenas se puede circular ¡en bicicleta de montaña!”. Mira al pasado y recuerda las numerosas ocasiones que mostraron su preocupación al Gobierno regional, tanto a través de cartas dirigidas a la Consejería de Fomento como en reivindicaciones en televisión y redes sociales. “La gota que colmó el vaso fue la borrasca Filomena, que agravó el deterioro de la carretera”, añade. Recuerda que esta vía estuvo enterrada en nieve durante “muchos días, que la memoria olvida, porque fue una de las últimas carreteras en limpiarse dado su irregular firme, y eso provocó numerosos contratiempos a los trabajadores que la transitan a diario”.
La ruta escolar que transcurre en un tramo desde Rada de Haro todos los días también sufre las consecuencias del mal estado de la carretera “y así lo publiqué en un vídeo de denuncia a través de redes sociales”. Casualidades o no de la vida, el caso es que “poco después de difundirlo, el Gobierno regional anunciaba que se iba a incluir el tramo entre Villaescusa de Haro y La Alberca de Záncara en los presupuestos del año 2021”. Concluye Solana que “esta carretera urge que esté en condiciones dignas por seguridad vial, por justicia social y porque representa un eje de comunicación importante para esta comarca en su conexión con San Clemente y otros lugares de la región”.
Texto: Antonio Gómez
Fotografía: El tramo de carretera entre Villaescusa de Haro a La Alberca de Záncara presenta numerosos desperfectos.