La Opinión de Cuenca

Magazine semanal de análisis y opinión

La Ley que nace malherida


La quimera educativa de la LOMLOE nace ya como un intento fallido de una ley educativa. Ya de por sí, el nombre, ley orgánica que modifica la ley orgánica de educación, denota pocas ganas de innovar, y desde luego subyace un inmovilismo con tintes de desidia.

Pero llegados al caso, este septiembre comienza la aplicación de la LOMLOE en los cursos impares de todas las etapas educativas, por lo que los maestros deben adaptar las programaciones de contenidos y competencias a la nueva ley, las editoriales editar e imprimir nuevos libros adaptados a los nuevos requerimientos legales, los centros educativos organizar horarios y plantillas en función del reparto de horas y asignaturas que nos marca... por no hablar de la dificultad de tener los cursos pares conviviendo con LOMCE y los impares con LOMLOE... Un carajal en toda regla.

Pero tranquilos que todo puede ir a peor. Como todos sabéis el estado promulga una ley educativa de la que salvo en Ceuta y Melilla no tiene competencias directas, por lo que una vez publicada en el BOE tienen que desarrollar los currículos educativos de cada una de las etapas. Una vez hecho esto se envían los currículos educativos a cada comunidad autónoma para que puedan elaborar ellos la parte autonómica que les corresponde en función de si tienen lengua vernácula en su autonomía o no, pero que serán sobre los que las editoriales imprimen nuevos textos. Como decía murphy sigue haciendo amigos, y esta semana se ha publicado la parte nacional del currículo de Ed. Primaria, ese donde tenemos que enseñar las matemáticas de forma socioafectiva, y los alumnos no pueden repetir los cursos impares, y los pares sólo cuando los astros se alineen en venus.

Aún nos queda el currículo de ESO y Bachillerato que está sin publicar. A partir de ahí, cada Comunidad autónoma comienza su elaboración para publicar antes de final de julio su currículo educativo sobre el que cada colegio elabora su propuesta pedagógica, elige libros y organiza horarios.

En la parte de Secundaria y Bachillerato, aún rizamos el rizo, porque cada autonomía elige algunas asignaturas optativas que difieren de una autonomía a otra, y por lo tanto la necesidad de profesorado también cambia, además de aparecer asignaturas nuevas como trabajo comunitario, monografía personal, proyecto interdisciplinar, que en la mayoría de los centros, salvo los internacionales, no ha realizado previamente.

Y digo internacionales, porque los centros que trabajan con la supervisión del IB (international Baccalaureate - movimiento educativo creado por naciones unidas hace más de 60 años) trabajan en una línea muy parecida.

Por traer a la memoria un caso relevante actual, la princesa Leonor actualmente estudia en el Colegio IB por antonomasia como es el Atlantic College de Gales, pero en España hay ya más de 100 institutos públicos que lo ofrecen y 75 privados desde 1977.

La LOMLOE toma como base metodológica la filosofía IB del aprendizaje donde el docente tiene un perfil muy diferente al profesor tradicional y ha tenido que pasar por un proceso de renovación metodológica que transforma sin lugar a dudas, el paradigma educativo. Por no hablar que en ese proceso de varios cursos y años el coste medio de la formación es elevada, pero que los colegios del mundo IB, tienen claro que es imprescindible antes de enfrentarse a alumnos que desde luego tienen una forma de trabajar y aprender muy diferente a la que tuvimos los que venimos de un aprendizaje tradicional.

El problema surge cuando tratamos de cambiar un modelo educativo y adaptarlo de una forma “creativa” a un sistema educativo nacional, donde ni el docente ha decidido participar, ni se le ha formado, ni se ha ido a visitar a otros colegas de profesión para vivenciar cómo se ejerce en un nuevo paradigma. No entro ya a valorar el énfasis que se produce en cuestiones no puramente educativas que desvirtúan totalmente el proceso de enseñanza - aprendizaje contenido en esta ley y que desde luego cualquier experto educativo en metodología IB asiste ojiplático a un sinsentido educativo promulgado en el BOE.

Desde estas líneas quiero pedir a nuestra ministra que sea valiente y deje a los centros autonomía docente real, que cada colegio pueda seguir una línea educativa propia que luego el tiempo y las familias se encarguen de juzgar si es el modelo que buscan para sus hijos.

La sensación que produce es la de tener un sistema de náufrago educativos totalmente a la deriva, tal y como pasó con el aprendizaje competencia que ya recogía la LOMCE y donde seguimos viendo boletines de notas con asignaturas y notas directas, pero sin saber qué es lo que mi hijo/a sabe hacer con esa materia, si sabe aplicarlo o en qué punto de mejora/aprendizaje se encuentra.

Estoy personalmente muy preocupado por los alumnos que comienzan 1o de Bachillerato, ya que realmente no vamos a poder como sistema educativo nacional hacer frente a los cambios desde septiembre, y una vez más la brecha será evidente, ya que los centros privados podrán cambiar y tener todo preparado a costa de trabajar en julio a velocidad de toque de retreta, pero no se si eel sistema está preparado y organizado para iniciar el 1 de septiembre un nuevo curso con todo preparado. Además recientemente hemos leído que la Selectividad vaa cambiar, para pasar de ser un examen que adolece de bulimia de contenidos, a pasar a un examen competencial donde el alumno demuestre su destreza. Ese cambio que aún no esta regulado en normativa, va a suponer una gran evolución, porque realmente el bachillerato nacional dejará de ser un modelo académico de acceso a la universidad, para volver a ser un modelo de aprendizaje preparatorio para la Universidad.

Desde aquí todo mi aliento y ánimo a los docentes que llevan dos cursos muy duros pendientes de sus alumnos, especialmente del estado emocional que han tenido que gestionar en sus aulas. Un trabajo muy duro, no reconocido suficientemente, y que cada día se ha llevado desde la discreción con la alegría de ver crecer a nuestros alumnos con la mayor normalidad posible. Ole, Ole y Ole Maestros.


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