En la posada del fracaso
donde no hay consuelo ni ascensor
el desamparo y la humedad
comparten colchón.
Y cuando por la calle pasa
la vida como un huracán
el hombre del traje gris
saca un sucio calendario del bolsillo
y grita:
¿Quién me ha robado el mes de abril?
¿Cómo pudo sucederme a mí?
¿Quién me ha robado el mes de abril?
Lo guardaba en el cajón
donde guardo el corazón…

  -Joaquín Sabina-


¿Quién me ha robado el mes de abril? ¿Quién nos ha robado el mes de abril? ¿Por qué nos han robado el mes de abril?... Nunca la vida ha sido fácil… No es fácil… ¿Quién me ha robado el mes de abril?...

Iniciamos mayo con una rueda de prensa desde Moncloa en la que el ministro de la Presidencia Félix Bolaños denunciaba "dos intrusiones" en el móvil del presidente Sánchez en mayo de 2021 y una en el de la ministra Robles en junio de 2021; los dos accesos tuvieron éxito y supusieron una fuga de datos que el Ejecutivo no concreta. ¿Fueron intervenciones "ilícitas y externas", ¿procedieron del extranjero o de España? El Presidente Pedro Sánchez se une a la lista de mandatarios afectados por el espionaje de Pegasus... Y este acontecimiento se se produce al conocer que Òmnium Cultural ha presentado una querella por las escuchas con Pegasus a los líderes independentistas y pide "investigar la involucración ilegal del Estado español"… Paz Esteban, destituida; discrepancias en el gobierno, la oposición carga contra Sánchez y lo acusa de “manchar el buen nombre de los servidores públicos del CNI”… Sigue la “política de regateo corto” con este asunto de los espías del CNI, una institución fundamental para la seguridad… Y asistimos a juegos de frivolidad y de salón en una “actualidad en guerra”… ¿Qué imagen de fiabilidad se da del Estado Español?... Claro que hay que hacer un ejercicio de transparencia, pero no para rebajar la ira del independentismo y sumarse al victimismo…; así se agrava el escándalo… Claro que tiene responsabilidad el Ministerio de Defensa y la Dirección del CNI…; pero no politicemos,… Y en un mes tendremos la cumbre de la OTAN en Madrid. ¿Cuántas brechas de incertidumbre y de vulnerabilidad hay abiertas en nuestro país? Sabemos que no hay seguridad total con los ciberataques… Tenemos enhebrado un buen enredo…

¿Quién me ha robado el mes de abril y los paseos por el Camino de las aliagas? Ya han desaparecido esas primeras flores de la primavera… Ahora busco lirios blancos, amarillos y morados, amapolas, flores de cardo, campanillas, las flores del espino blanco, pascua florida, rosas y mayos…; flores que crecen en nuestros campos y me transportan a la primavera de la infancia y las canciones de mayo.

Pienso en Flora; en las Tres Gracias (jaris) que ofrecen sus dones y en Cupido que hiere de amor… Y encuentro La Primavera (1477?) de Sandro Botticelli en la que recibimos el canto a la naturaleza, a la belleza, a la armonía, a la frondosidad, a la gracia, a la fertilidad, al amor, y a la tradición de la cultura de Occidente; pero también a una cierta melancolía… La obra La Primavera está impregnada de la cultura humanística y neoplatónica de la corte de Florencia de Lorenzo el Magnífico. Una atmósfera de fábula mitológica celebra un rito pagano, que rompe con la pintura religiosa cristiana de la Edad Media. Es el Renacimiento y el hombre será, como en la cultura clásica griega, “la medida del todas las cosas”, tras más de mil años de teocentrismo…

Existen diversas interpretaciones de la obra; pero la mayoría de expertos coinciden en que la figura central se corresponde con Venus, la diosa del amor (Afrodita en la mitología griega), vestida con túnica blanca y manto rojo, alzando su brazo derecho saludando e invitando a entrar en su jardín. A la derecha aparece Céfiro, dios del viento, en el momento en que rapta a la ninfa Cloris, vestida con una túnica transparente; en ese mismo instante Céfiro se enamora de la ninfa y la convierte en su esposa y en Flora, diosa de las flores y los jardines; es la figura que aparece a la derecha de Venus, vestida con un traje decorado con flores y sosteniendo un cesto de flores que va esparciendo por el suelo. Sobre Venus está Cupido (Eros en la mitología griega), que dirige su flecha hacia las tres Gracias, diosas del encanto, la belleza y la fertilidad; representan la castidad, la voluptuosidad y la belleza. En la mitología romana personificaban tres prototipos de mujer: la virgen, la esposa y la amante. En el lado izquierdo aparece Mercurio, dios del comercio, vestido con una clámide roja decorada con llamas, con casco y daga y con sus típicas botas aladas; con el brazo derecho sostiene un caduceo —bastón con dos dragones —, con el que ahuyenta unas nubes. Mercurio, como dios del comercio y de la razón, dirige la mentalidad humana hacia la divinidad.

Botticelli presta una gran atención al detalle; vemos diversas piezas de orfebrería, el casco, la empuñadura de la espada de Mercurio, las cadenas y los broches de las Gracias; todo representado con gran minuciosidad. Las figuras son delgadas, estilizadas,… muy idealizadas, delicadas, sutiles, marcados perfiles, claridad de la piel, trasparencias, desnudo, que nos anuncian el estilo elegante y cortés del manierismo del siglo XVI. Una luz sobrenatural emana de los cuerpos sobre el fondo de un bosque de naranjos, pinos, mirto y laureles: El suelo es una capa de hierba oscura donde destacan margaritas, violetas, rosas, eléboros, viboreras, tusilagos, fresas, jazmines, …., jacintos y ranúnculos. Flora lleva en la cabeza violetas, acianos y una ramita de fresas silvestres; en torno a su cuello, una corona de mirto; en el manto, rosas. De la boca de la ninfa Cloris surgen pervincas, fresas, rosas, anémonas y acianos. En los pies de Las Gracias hay nigella, nomeolvides y azafrán.

Ernst Gombrich (Botticelli's Mythologies, 1945) identificó la figura de Venus como Humanitas, la humanidad, personificación del nuevo humanismo renacentista. Humanitas sería el ideal de las cualidades humanas: el Amor, la Caridad, la Dignidad, la Magnanimidad, la Liberalidad, la Magnificencia, la Gentileza, la Modestia, el Encanto y el Esplendor; y alude al conocimiento superior y a la unión con la divinidad. La Belleza conduciría a la Moral. Las obras mitológicas de Botticelli reflejarían también valores propios del arte sagrado, La Primavera sería equiparable a la Virgen de la Anunciación.

Por la radio escucho que el desarrollo de la inteligencia artificial y la genética marca un camino inesperado hacia el transhumanismo, corriente que ambiciona trascender las capacidades humanas normales a través de la tecnología, sobre la que los expertos reclaman un consenso ético y regulatorio antes de que sea una realidad. Los tecnolibertarios se posicionan a favor del avance tecnológico para solucionar los problemas de la humanidad frente a los tecnoescépticos y tecnófobos que ven la tecnología alienante y deshumanizada…

Pero, ha llegado Mayo… Mayo,… el origen de su nombre es incierto. Puede derivar de la diosa romana Maia, cuyo festival se celebraba este mes que llamaban Maius. También podría provenir de la ninfa Maya, hija de Atlas y Pleione y madre de Hermes. Una tercera opción de su origen podría ser del término Maius Jupiter, una reducción de maximus, el más grande.

De acuerdo con la tradición, la piedra de mayo es la esmeralda, y su flor, el lirio. Los lirios en la antigüedad se asociaban con el nacimiento y la maternidad. Hoy esta preciosa flor representa el amor, la amistad, la alegría. En algunas religiones esta flor es símbolo de castidad, inocencia, pureza y piedad. La esmeralda simboliza el poder, la inmortalidad y, con su tono verde, la eterna juventud. Al igual que el rubí, también se dice que la esmeralda es una piedra curativa. Las minas de esmeraldas más antiguas se encuentran en Egipto, donde fueron extraídas por egipcios, griegos, romanos, árabes y turcos otomanos. Estas minas se conocen como las minas de Cleopatra. Los Incas también apreciaron el color verde de las esmeraldas y las convirtieron en joyas. Cuando los conquistadores españoles llegaron a América del Sur en el siglo XVI, iniciaron el comercio de esmeraldas sudamericanas con Europa y Asia, intercambiando las piedras por metales preciosos. Los antiguos griegos la vinculaban con la veracidad y la elocuencia. Los Aztecas adornaban las estatuas de los dioses con esmeraldas, y en la Edad Media, se pensaba que ayudaban a llevar una vida virtuosa.

En mayo se celebra el mes de María o mes de las flores. Las flores… La flor, por su naturaleza, es símbolo de fugacidad de las cosas, de la primavera y de la belleza. En el texto de Los Ocho Inmortales chinos Lan Ts´ai-Ho aparece generalmente en las imágenes con traje azul y llevando una canastilla de flores. Se dice que él se dedicó a cantar textos alusivos a la fugacidad de la vida y a lo efímero de los placeres. Los griegos y romanos se coronaban con flores en todas sus fiestas; cubrían con ellas a los muertos y las esparcían sobre sus sepulcros. Por su forma, la flor es imagen del centro y del alma. Flores celestes se llaman a los meteoritos y estrellas fugaces y son símbolo de la obra del sol.

La rosa es considerada la reina de las flores; ha inspirado a poetas y pintores; es símbolo del amor, de la virtud, de la confianza, de la virginidad; pero también del misterio. Es la Rosa Mística de los cristianos el símbolo de la Virgen María. Las leyendas de las rosas son innumerables. Se dice que Cibeles, la diosa madre, la creó para vengarse de Afrodita, pues solo la belleza de la rosa podía competir con la diosa del amor. La flor fue consagrada a Afrodita; su belleza y perfume simbolizan el amor y sus espinas las heridas que puede causar. Se cuenta también que la rosa es hija del rocío; nació de la sonrisa de Eros o cayó del cabello de Aurora, diosa del alba, cuando se peinaba… Según una leyenda rumana, una hermosa princesa se bañaba en un lago y el sol se paró en el cielo tres días para contemplarla y cubrirla con besos; cuando Dios se dio cuenta de que el orden del universo estaba en peligro, transformó a la princesa en rosa y ordenó al sol que siguiera su camino… Por esa razón las rosas bajan su cabeza y se sonrojan cuando el sol las saluda…

En Mayo, el amor… Vivir es delirar y hay un delirio divinos que es el amor… -María Zambrano-. Y las palabras del amor llegan al pueblo en la voz de la poesía, porque amor y poesía rastrean el alma de los pueblos de hombres sabios que saben dialogar con su propio corazón… El amor que nos produce vértigo, nos sacude con su poder, nos eleva y nos hunde, porque puede ser equívoco, inalcanzable, ausente, puede llevarnos al cielo o al infierno… También puede ser creación…, una creación en la distancia, en la ausencia, en el sueño… algo que nos contagie de inmortalidad… y nos inunde de luz…

Acudo a Schi – King y a su Libro de las canciones, un valioso legado de la China Antigua, que inicia la lírica en su territorio, que surgió de la danza y de la música. Esta obra ha sido preservada y transmitida con especial esmero, pues recoge poemas que van desde el II milenio a. C. hasta Confucio (551-474 a.C). Dice así: Si por el camino / te cojo de la manga, / no por eso te enfades: / Cuesta cambiar una costumbre. Si por el camino / te cojo de la mano / no lo tomes a mal: / Se tarda en cambiar el querer.

Li Tai Po (s. VIII), uno de los líricos más completos de todos los tiempos, llamado el varón de la tristeza, nos habla de la ternura, la fuerza, el tormento, la hermosura y la felicidad del amor… : Mi amigo vive arriba, en la Sierra de Levante, / y le enamora la belleza de valles y montes. / En la primavera, se acuesta en los bosques vacíos / y duerme todavía cuando el sol brilla en lo alto…

Todo tiempo es propicio para el amor. Pero, ¿será mayo un mes especial?... Dice el romance lírico castellano del Prisionero: Que por mayo era por mayo,/ cuando face la calor, / cuando los trigos encañan / y están los campos en flor,/ cuando canta la calandria / y responde el ruiseñor, / cuando los enamorados van a servir el amor…

 En El Cantar de los Cantares, en hebreo Sir Hassirim, joya literaria atribuida a Salomón y que expresa en ardorosas metáforas de amor humano el símbolo del amor místico, leemos: Levántate amada mía,/ hermosa mía, y vente. / Porque, mira, ha pasado ya el invierno, han cesado las lluvias y se han ido. / Aparecen las flores en la tierra,/ el tiempo de las canciones ha llegado/ se oye el arrullo de la tórtola en nuestra tierra…

 La primavera, las flores, el amor, mayo… Los Mayos…

Ben vennas, Mayo, e con alegría;
poren roguemos a Santa María
que a seu Fillo roque todavía
que el nos guarde d´err´ e de folia.
Ben vennas, Mayo.
Ben vennas, mayo, e con alegría.

- Alfonso X El Sabio (1221-1284), Cantiga CDVI-

(Continuará…)